Ayer me aventuré a irme de rebajas por el centro de Barcelona. ¿Locura? Probablemente, eso es lo que pensé nada más entrar en la primera tienda y vi el macro-bullício que había dentro. Gente por cada rincón moviendo perchas, apartando montones, hablando cientos de idiomas distintos, gente agachada, levantada, corriendo, sudando... Colas para pagar, para probar, ¡para mover las perchas y ver la ropa!. Estuve a punto de desistir pero pensé que, dado que necesitaba ciertas cosas, era mejor tomarse el respiro, comer algo y volver a coger aire en busca de la mejor ganga...
¡Menuda odisea para encontrar un restaurante, bar o fast-food donde no hubiera que hacer cola o comer de pie! Al final encontré un conocido establecimiento de bocadillos escondido en un callejón tranquilo y me senté. Saqué mi lista y la revisé. (Consejo importante para las rebajas en tiempos de crisis: LA LISTA. Hacerse una lista con lo que realmente se necesita y jamás, es decir, JAMÁS, apartarse de ella. Es duro, pero no imposible!). La mía tenía en su contenido algunas cosas como: pantalones cortos, ropa sport para pasear y/o correr con Niki, un vestido corto, un cinturón, unas sandalias, un vestido largo, un brazalete porta mp3, ropa interior y alguna cosita más (Mi armario estaba en zona roja).
Aquí hay algunas de las cosas que me compré: (el resto, en la lavadora)
¡Menuda odisea para encontrar un restaurante, bar o fast-food donde no hubiera que hacer cola o comer de pie! Al final encontré un conocido establecimiento de bocadillos escondido en un callejón tranquilo y me senté. Saqué mi lista y la revisé. (Consejo importante para las rebajas en tiempos de crisis: LA LISTA. Hacerse una lista con lo que realmente se necesita y jamás, es decir, JAMÁS, apartarse de ella. Es duro, pero no imposible!). La mía tenía en su contenido algunas cosas como: pantalones cortos, ropa sport para pasear y/o correr con Niki, un vestido corto, un cinturón, unas sandalias, un vestido largo, un brazalete porta mp3, ropa interior y alguna cosita más (Mi armario estaba en zona roja).
Aquí hay algunas de las cosas que me compré: (el resto, en la lavadora)
Lo más curioso (aunque no es tanta sorpresa) fué la compra de un encargo que me había hecho mi tia. Tenía que hacerme con una camiseta (falsa) del FCBarcelona de color amarillo. Cuando entré en la típica tienda de souvenirs de las Ramblas, el dependiente me hizo un descuento de 20€ por ser chica española. Eso sí es una ganga, ¡ya podría colar en más sitios!
No hay comentarios:
Publicar un comentario